Hernán Cortés partió de Cuba hacia México, desembarcó en Yucatán, donde derrotó a los mayas de Tabasco y fundó su primera ciudad. Aquí los indígenas le entregaron veinte mujeres, entre las cuales estaba Malintzin (La Malinche), la que se convirtió en su mujer y principal traductora. Al llegar a las tierras de los totonacas, fundó la ciudad de Villa Rica de la Vera Cruz. Aquí se proclamó Capitán General.
Los totonacas dejaron de tributar a los aztecas de Tenochtitlan, y se aliaron a los españoles. El 16 de agosto de 1519, Hernán Cortés empezó la expedición al interior de México.
A mitad de camino logró el apoyo de los tlaxcaltecas. Al enterarse de esto el emperador Moctezuma II ordenó algunos ataques contra los españoles, pero no pudo evitar que Hernán Cortés llegara a Tenochtitlan el 8 de noviembre de 1519. A los pocos días Moctezuma fue hecho prisionero. Pero Cortés tuvo que regresar hacia la costa para enfrentar a Pánfilo de Nárvaez, enviado por Diego de Velásquez. Al regresar a Tenochtitlan estalló una gran rebelión de los aztecas cansados de las tropelías que hacían los extranjeros, sobre todo el capitán Pedro de Alvarado. Los rebeldes, liderados por Cuitláhuac, lograron expulsar a los cristianos en la madrugada del 1 de julio de 1520 "La Noche Triste".
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